Cuántas veces hemos ido por la calle y vemos mujeres con mirada de impacto? Las pestañas permanentes o postizas te permitiran obtener la mirada perfecta y cargada de magia que siempre has deseado.
Existen muchos métodos actualmente para lograr unas pestañas fuertes y largas, algunas personas prefieren invertir el tiempo en productos naturales que les ayuden a lograr este objetivo, por otro lado están aquellas mujeres que prefieren el aspecto cosmético definitivo como máscaras resistentes o pestañas permanentes.
Este último método es uno de los más cómodos, y con resultados no solamente rápidos sino además satisfactorios, cada día son más las mujeres que apuestan por el método de las pestañas postizas con la intención de conseguir la mirada que siempre quisieron.
¿Es el método de pestañas permanentes ideal para mí?
Una de las preguntas que siempre debemos hacernos con respecto a si las pestañas permanentes son para mí, al igual que con cualquier otro tipo de tratamiento estético, es si estamos o no preparadas para el cambio.
Normalmente cuando no nos agrada algo dentro de nuestro cuerpo, siempre tenemos la idea clara de que queremos sustituirlo, reemplazarlo o mejorarlo, pero cuando esto ocurre muchas veces no cumple con las expectativas que nos habíamos propuesto. Para entender un poco cómo es esto, vamos a explicar de una forma sencilla y clara sobre cómo es este método.
Consiste en tomar cabello real para hacer las extensiones, básicamente se ponen una a una las pestañas permanentes en la cavidad del ojo donde se ubican nuestras pestañas reales, la idea es poblar las pestañas y dejarlas más alargadas que las otras para dar una apariencia fuerte, consistente y mucho más real.
Las pestañas permanentes tardan mucho en ubicarse, es un proceso que es complejo, pero no es invasivo o doloroso, por lo que solamente debemos tener paciencia y elegir un profesional con la experiencia suficiente para darnos resultados óptimos.
¿Cómo saber si realmente necesito las pestañas permanentes?
Puede parecernos una pregunta un poco extraña, pero muchas veces solemos exagerar los aspectos que no nos agradan de nosotros. Las pestañas de este tipo están pensadas para mujeres que poseen poca presencia de cabellos en sus párpados, lo que les da la apariencia de no tener pestañas.
También está pensado este método para aquellas mujeres que tienen pelos pero que estos no presentan ninguna curva, o para aquellas cuyos cabellos son demasiado cortos y por ello no funciona ningún tipo de producto cosmético.
¿Cómo debemos cuidar nuestras pestañas permanentes?
Una de las preguntas que nunca deben faltar es la forma en la cual debemos cuidar nuestras pestañas, de estos cuidados depende mucho la duración que estas tengan, que varía entre las 3 y las 6 semanas dependiendo del tipo de pestañas que elijamos.
Dentro de los cuidados que se recomiendan debemos tener con las pestañas permanentes encontramos los siguientes:
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Desmaquillarse: sabemos que después de que estén bien adheridas las pestañas pueden maquillarse, el error consiste en no quitarlo. Si queremos evitar que se peguen o que se dañen de forma más rápida, entonces debemos procurar de quitarlo todo. Podemos utilizar un producto que quite el maquillaje sin mucho problema y de forma rápida.
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Secar: siempre debemos secar una vez que salimos de la ducha o cuando lavamos el rostro, de esta forma podemos tener nuestras pestañas por más tiempo. El agua puede ir eliminando el pegante o adhesivo que se utilizó para poner las pestañas permanentes, por lo que si tratamos de secarlas bien, estas pueden durar mucho más tiempo.
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Evitar tirones: otra de las buenas recomendaciones consiste en evitar dar tirones a las pestañas, de esta forma evitamos arrancarlas o desprenderlas. Si tenemos especial cuidado con ellas, las tratamos con delicadeza y evitamos la fuerza, podemos entonces tenerlas por mucho más tiempo.
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Cuidado al dormir: otra de las recomendaciones que son muy importantes al momento de dormir consiste en que no debemos apoyar mucho el rostro sobre la almohada, de esta forma evitamos dañar la forma de las pestañas y desprenderlas de los ojos.
